miércoles, febrero 08, 2006

Seis vidas en protesta por unas caricaturas



¿Es legítimo expresar un punto de vista que pueda herir susceptibilidades de tipo religioso? En principio cada uno de nosotros tiene derecho a su propia opinión sobre las cosas y a expresarla de viva voz por los medios a su alcance, esperando que del intercambio con otras opiniones pueda hacerse un juicio acertado de la realidad.

En el caso del Islam está prohibido hacer representaciones gráficas de Mahoma o de los demás profetas y esta prohibición, entiendo que está dirigida a los musulmanes.

Nos preguntamos si no es posible hacer una crítica que genere una reflexión acerca de los inconvenientes y los peligros de juntar la religión con la lucha política y eso merece ser sometido a una sana critica.

New york times
----------------------------------------


" Para EEUU crisis de caricaturas son una "lección" para Europa

Washington.- Estados Unidos ocupa un lugar privilegiado en la crisis por las caricaturas de Mahoma. Por primera vez no son ellos sino los europeos el blanco del odio, la indignación y la violencia en el mundo árabe. Para Washington, más allá de las expresiones de solidaridad con Dinamarca, la disputa es en el fondo una lección sobre política de inmigración, minorías y libertad de expresión. "

Diario danés se mantiene firme en su postura 07 de Febrero de 2006, 02:46pm ET
El diario Jyllands-Posten ha generado controversias a lo largo de sus 135 años de vida, pero nunca de la magnitud que alcanzó la publicación de caricaturas sobre Mahoma.
La publicación de caricaturas del profeta dio lugar a violentas manifestaciones a lo largo y ancho del mundo musulmán.
El diario, no obstante, se mantiene firme en defensa de su misión de suministrar "noticias imparciales y opiniones francas".
Gerhardt Eriksen, empleado jubilado del Jyllands-Posten que escribió dos libros sobre el diario, dice que el periódico está acostumbrado a los enfrentamientos con lectores y políticos.
Relató que en 1959 el primer ministro soviético Nikita Jrushov suspendió una visita a Dinamarca porque el Jyllands-Posten había publicado artículos "muy críticos de la Unión Soviética".
Acotó que esa postura es coherente con su larga tradición anticomunista.

No hay comentarios: